Día 4 (20/10/2014)   Jaipur: Fuerte Amber


Antes   

Mapa de los alrededores de Jaipur


   Este día estará dedicado íntegramente a la visita de los puntos de interés a las afueras de Jaipur.

   Podremos llevarlo a cabo fácilmente gracias a que el hotel nos incluye un coche con conductor.

   La prioridad y, probablemente nuestra primera visita del día, será el Fuerte Amber. A la vuelta podremos disfrutar de las vistas del palacio en el lago, el Jal Mahal.


   Los puntos marcados en el mapa son:

 0- Hotel Umaid Mahal
 1- Fuerte Amber
 2- Jal Mahal
 3- Cenotafios
 4- Galta

Después

   Tras un buen desayuno estamos listos para que el chico de ayer, Khan, nos recoja a las 9h. Salimos de la ciudad rosa hasta la localidad de Amber para visitar su famoso fuerte.

   Khan nos para junto al lago para que inmortalicemos las vistas del fuerte desde aquí. Hemos de llegar por aquí cuando volvamos y él nos estará esperando, pero como hemos decidido subir en elefante, nos lleva al lugar adecuado.

Vista del fuerte Amber

   El elefante tiene un precio fijo de 900 Rs y nos subimos a uno escapando de la intensa presión de los vendedores. Sin embargo, no nos libramos pues continúan gritando sus ofertas bajo el elefante mientras subimos. Haber dicho "no" cien veces no sirve de nada y corrompen un poco la experiencia. De todas formas, la subida es espectacular, con las empedradas calles y los muros como entorno, y las vistas, que van mejorando con la subida, como extra.

Salida de elefantes a Amber FortSubida a Amber Fort en elefante














Vistas desde Amber FortSubida a Amber Fort en elefante


















   Ya arriba sacamos las entradas por 200 Rs cada una y huimos definitivamente de todos los vendedores entrando al recinto del fuerte.

Fuerte de AmberFuerte de Amber
















   Los edificios nos recuerdan a los ya vistos ayer en el palacio: con estructuras con arcadas y plantas de niveles desiguales, aunque aquí tienen un aire propio que los hace diferentes. Hay puntos espectaculares.

Fuerte de AmberFuerte de Amber
















   En todo momento buscamos la sombra. Cuando ya intuimos el final de la visita una música nos atrae. Viene de un encantador de serpientes que cesa su actividad cada poco tapando la cobra en su cesto.

  En un momento de descanso hace un gesto a los presentes ofreciendo un lugar a su lado y yo no me lo pienso dos veces. Allí puedo descubrir que él toca la flauta hasta que la cobra deja de mirarle. En mi caso fue cuando ésta se gira hacia Eva, entonces interpone la tapa a su visión y la cierra. Puedo ver como la cobra ataca la tapa del cesto con su fatal, pero ahora fútil, mordedura.

Camino a la salida del Fuerte AmberEncantador de serpientes
















  Salimos por la que nos indican como "car park exit" pero pronto vemos que el aparcamiento en cuestión está aquí arriba y no es donde nos esperan. Como eso es junto al lago, allá abajo, seguimos el camino. No me acaba de cuadrar que seamos los únicos peatones y tampoco que estemos en la parte opuesta al lago, pero tengo la esperanza de que una vez abajo encontremos fácilmente la salida que nos indicó nuestro conductor.

   Eso no pasa, aunque sí encontramos la tienda de souvenirs con mejores precios hasta ahora y, más adelante, un genuino paseo atravesando el pueblo entre elefantes, vacas, cerdos y locales.
Paseando por AmberPaseando por Amber
  Sin embargo, cuando ya llevamos un rato y la carretera deja el pueblo hacia un lugar desconocido tenemos claro que no es el camino correcto, así que paramos un rickshaw para que nos lleve por 100 Rs, aunque ya fuera ocupado con una joven india que se acurruca en su lado para dejarnos sitio.

   En el camino de vuelta Khan nos dice que Galta es la visita que queda más cerca de las que tenemos y a allí nos lleva, pero antes hacemos una breve parada en un paseo con buenas vistas al Jal Mahal, también conocido como "Water Palace" (Palacio de agua) por motivos evidentes.

Jal Mahal o Palacio de AguaEntorno del Jal Mahal
















   Llegados a Galta, nos asignan un chaval con la excusa de que como es de allí los monos no atacarán, con la referencia de que sólo habrá que darle la voluntad, y comenzamos la subida. El calor no lo hace fácil y el chico nos explica cosas como si estuviéramos allí por los monos.

Vistas de Jaipur en la subida a Galta

   En la cima, nos señala una casita blanca y nos dice que ese es el templo de los monos y nos propone volver. Ese es el momento en el que le hago saber que sé muy bien cuál es el templo y que yo no he venido por los monos, sino por el paisaje. Resulta que el templo en cuestión está algo lejos allá abajo y que la subida de vuelta se adivina criminal, por lo que deduzco que su actitud se ha debido a que se la quería ahorrar. Lo demuestra cuando Eva dice que no se ve con fuerzas de hacer ese trayecto y él propone acompañarla al coche y que yo me chupe sólo ese esfuerzo. Al parecer el ataque de los monos ya no preocupa.

   La bajada es sencilla y cuando llego me recibe un hombre que se presenta como el sacerdote del templo a Hanuman, el dios mono, y me muestra lo que ellos presentan como una imagen natural en el relieve de la roca del dios, que han resaltado con pintura naranja. Rechazo que me ponga una pulserita de hilo mostrando que no visto abalorios pero acepto que me dibuje el punto en la frente. Los monos se asoman curiosos por la puerta del templo.

Puerta del templo al dios mono HanumanAnimales en el agua, junto al templo de Hanuman
















  Obviamente me acaba pidiendo una ofrenda monetaria y le doy 50 Rs para la causa. El cambio del billete de 100 se va en el ticket de 50 Rs que ya conocía para poder hacer fotos en el recinto, cuya entrada es gratuita.

Templo de GaltaGalta
















   Este lugar me hace sentir especial, como Indiana Jones entrando en una ciudad aislada del mundo. Paso entre muros centenarios junto a monos y alguna vaca. Unas estrechas escaleras bajan junto al templo enclavado en el hueco de este desfiladero. La primera abertura del muro muestra a varias mujeres tomando sus baños en este agua sagrada para ellas y varios chiquillos se me acercan y actúan como si viniera de otro planeta: me miran sonrientes y todos quieren tocarme y hablar conmigo aunque no haya forma de entendernos. Los únicos hombres adultos por aquí son gurús, con barbas y cabellos blancos y largos y unos austeros ropajes.

   Finalizo esta visita tan especial enfrentándome a la subida rompe-piernas bajo este calor que hace que vuelva chorreando.

Camino a GaltaPuerta al recinto de Galta
















  La voluntad para el chico resultan ser otras 50 Rs. Él pide más, pero calla cuando le recuerdo que nos ha intentado engañar.

  Nuestra última visita del día es a Gaitor, las tumbas reales y para allá vamos.

   Tardamos un poco más en llegar, pero la visita es rápida. Tras pagar 30 Rs cada uno entramos a explorar las tres secciones de cenotafios. Estamos solos, lo que en este país es un regalo.

Cenotafios realesCenotafios reales














Cenotafios realesCenotafios reales


















   De nuevo conseguimos estar para comer en el hotel, sobre las 15h, tras despedirnos de nuestro amigo, que ha sido una bendición en una ciudad donde todos parecen estar para sacarte lo máximo.

  Hoy buscamos descansar de picante y remoloneamos en la habitación hasta nuestra hora de acostarnos. Aunque justo entonces oímos los petardos fuera y nos asomamos para ver algo de los fuegos artificiales. El Diwali ya está aquí.