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Día
5
(28/09/2017) Bukhara
Antes
Tenemos un vuelo a Bukhara temprano, a las 7:30h.
Como es
de una hora y media de duración, tendremos el día entero para explorar
Bukhara.
Los puntos markados en el mapa son:
0- Hotel Khurjin
1- Plaza Labi Khauz
2- Chor Minor
3- Poi Kalyan
4- The Ark
5- Parque exterior: Mausoleos de Ismail Samani y Chasmai Ayub.
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Después
Desayunamos y, mientras Eva prepara las maletas,
yo voy al
banco a cambiar más euros ya que ayer comprobamos que era la mejor
opción. Poco antes de las 11h salimos a la carretera a poner en
práctica lo aprendido ayer con los autobuses y subirnos a uno que vaya
al Aeropuerto 3 por 1200 soms cada uno. En el aeropuerto,
las botellas de agua en la máquina de vending valen 1500 soms. Yo meto
un billete de 5000 y resulta que no da cambio, así que saco dos
botellas y el único snack de 2000 soms, que son una especie de
pastillas que resultan ser queso. El producto se llama Kurt.
A parte de esto, todo va rodado: facturamos y
esperamos a
que abran la puerta de embarque para el único vuelo que hay a estas
horas. En hora y cuarto estamos en Bukhara donde pillamos un taxi al
hotel por 30000 soms.
 
El hotel Khurjin es un atractivo en sí mismo: está situado en un
edificio histórico del siglo XVIII con dos pintorescos patios. La
habitación también
está llena de detalles.
 
Salimos buscando un sitio para comer y lo hacemos
en el
restaurante Temir's, que sólo tiene terraza con techo. Se
diría
que los establecimientos no estan preparados para este frío que ha
llegado hoy repentinamente, pero nos sacan unas mantas especiales que
tienen para estas ocasiones. Dos platos de una especie de sopa de
spaguetti con carne y una ración de pollo frito por 146000 soms. Nos
parece caro.
Después exploramos la cercana plaza Lyabi Hauz, el
centro
neurálgico de esta ciudad vieja.
 
Entramos en la madrasa Nadir Divanbegi
y admiramos la khanaka Nadir Divanbegi y la madrasa Kulkedash, que son
los tres monumentos que rodean la plaza.
 
 
Tampoco nos resistimos a entrar a alguna de las tiendas que
rodean la plaza, como una gran tienda de ropa y un taller de títeres.
 
Continuamos nuestro paseo por la calle principal
que nos
hace atravesar un bazar, el Taki Telpak, donde acabamos comprando una preciosa miniatura
por 20 euros.
 
Hay tres edificios que están considerados bazares, pero las calles están llenas de tiendas y puestos de
souvenirs también, aunque todos venden más o menos lo mismo, con lo que no hay diferencia entre bazares y calle.
 
Descansamos un rato en el hotel, que es un antiguo
caravanasar, y salimos por la noche a pasear. Queremos ver Poi Kalon
iluminado, pero cuando llegamos está todo oscuro. El único lugar con
vida a estas horas, las 20h, es la plaza Lyabi Hauz, que ya conocemos.
 
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