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Día
3 (21/10/2018) Ubud
Antes
Este día debería estar dedicado a Ubud y, tal vez,
alguna visita cercana a la ciudad. También es el
día para hacer compras y, seguramente, probar una de las especialidades
locales: los masajes.
Los puntos marcados en el
mapa, que son los que
nos gustaría abarcar, son:
0- Hotel The Umari
1- Palacio de Ubud
2- Campuhan Ridge Walk
3- Mercado de Ubud
4- Monkey Forest
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Después
Nos traen el desayuno a las 8h, como habíamos
quedado. Media hora después salimos del hotel en dirección al centro de
Ubud. Pasamos de largo el palacio, pues está cerrado. La ciudad está
llena de preciosos rincones con templetes y las ofrendas aparecen en
el suelo de la acera constantemente.
 
A esta hora de la mañana, vemos
gente poniendo nuevas ofrendas en los pequeños altares que tienen en
sus casas y rezándoles. El tráfico en la calle principal es constante,
con el sonido del enjambre de motos que nos acompaña todo el trayecto.
Nuestra primera visita es al templo del río, el cual no pudimos
localizar antes de venir, pero es fácil de encontrar ya que está en la
calle principal (Calle Raya Ubud). Es curioso como separarse
unos pocos metros de esa calle te puede llevar a un mundo tan diferente.
 
Seguimos esta calle hasta alcanzar el comienzo del
Campuhan Ridge walk. Nuestro plan es asomarnos al principio de este
recorrido, que ya es fantástico. Los paisajes tras el templo son de
pura selva, con plantaciones de arroz aquí y allá.
   
Estamos cansados y pensamos en pillar un taxi al
Monkey Forest, pero como no encontramos ninguno, desandamos el camino
hasta el palacio. Antes visitamos el templo junto al Cafe Lotus, donde
el estanque de delante rebosa loto de tal manera que no se ve el agua.
 
Luego entramos al palacio donde, a parte de
recorrer sus patios, pues el interior no está abierto a las visitas,
compramos las entradas para su espectáculo nocturno de danzas
balinesas: 100000 rupias cada uno.
 
Hacemos un poco de tiempo antes de comer
recorriendo el mercado central, donde las tiendas de artesanía se
suceden. Para comer escogemos la terraza del Bamboo Guest House, donde
nos hacemos con dos platos de arroz con marisco, una ensalada griega y
un postre a base de trozos de fruta con yogur y miel por 214000 rupias.
De ahí tomamos la calle Monkey Forest, llena de
tiendas modernas de moda, hasta el bosque que da nombre a la calle.
Vemos antes al "monkey" que al "forest".
 
Las entradas al Monkey Forest cuestan 50000 rupias
cada una. Ya dentro, enseguida nos topamos con grandes grupos de monos,
ya que estos se acumulan en las plataformas de alimentación, donde
tienen boniatos a su disposición.
 
Seguimos el recorrido por este trozo de jungla que
está repleto de sitios preciosos para fotografiar, independientemente
de los monos, que acaban pasando de protagonistas a extras.
   
Al salir descubrimos que hay un autobús gratuito
para clientes al centro de Ubud, así que lo tomamos y nos deja frente
al palacio. De ahí volvemos al hotel a descansar y relajarnos en la
piscina.
 
Alrededor de las 18h salimos y cenamos en la calle
principal de camino al palacio: macarrones agliolio, pollo a la plancha
y brownie por 124000 rupias. Llegamos al palacio a las 19:15h. El
espectáculo comienza a las 19:30h, pero ya está lleno y nos cuesta
encontrar un sitio.
Las danzas duran hora y media y me sorprende la
importancia que tienen los ojos, que mueven al compás, evitando
parpadear hasta que no giran a otro lado. Hay gran número de músicos
tocando instrumentos tradicionales y los bailarines cambian sus
coloridas vestimentas para cada una de las danzas.
 
Hoy ha sido un dia completito, y eso es lo que
pensamos camino al hotel, donde pillamos la cama con ganas por el
cansancio acumulado.
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