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Día
1
(13/09/2020) Brescia
Antes
El aterrizaje en el aeropuerto de Milán Linate
está
previsto para las 16:40h. Allí recogeremos el coche de alquiler y
saldremos hacia nuestro hotel en Brescia. No tenemos claro donde
colocaremos la comida este dia, pero la cena parece segura en Brescia.
Entre lo que quede de día y la mañana del próximo tenemos previsto
visitar los lugares de nuestra lista, todos en el casco antiguo de
Brescia, a los que podemos llegar andando desde el hotel.
Los puntos marcados en el mapa son:
0- Hotel Master
1- Castillo de Brescia
2- Capitolium
3- Piazza del Duomo
4- Piazza della Loggia
5- Torre della Pallata
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Después
Nos enfrentamos a la nueva normalidad de viajar
durante la pandemia, que nos obliga a llevar la mascarilla puesta desde
que entramos al aeropuerto de Dublín hasta que salimos del de Milán. A
cambio, no hay esperas ni en la facturación ni en el control de
seguridad y, al ser pocos en el avión, el embarque es rápido y el vuelo
con espacio, pero sin carrito de comida y bebidas.
La entrega del coche también va rápida, aunque
tenemos que esperar a dos clientes anteriores. Esta espera es fuera de
la oficina, pues es pequeña y solo se admite una persona. En apenas una
hora llegamos a nuestro hotel en Brescia y, tras la entrega de la
habitación, salimos a una comida-cena, pues son más de las 18h .
En 10 minutos llegamos a la Piazza della Loggia y pasamos por debajo de
la Torre del Reloj para escoger un
restaurante bonito para darnos un homenaje. Esta zona está llena de
restaurantes. Nos pedimos dos platos de pasta con olivas y vieiras que
están buenísimos, pero por el precio esperábamos una cantidad que diera
para plato único y nos
queedamos con un poco de hambre tras pagar 54 euros por la comida, el
vino, la cocacola y el agua.
Rematamos el hambre con unos helados en la primera
Gelateria que encontramos. Son más de las 19h y ya es de noche. Así que
paseamos por las zonas que teniamos pensadas visitar, las del mapa de
arriba, que nos ofrecen sus encantos con su iluminación nocturna.
Primero pasamos por la Piazza del Duomo, donde se encuentran juntas la
catedral
vieja y la nueva y, por si fuera poco, un hermoso palacio de piedra con
una torre alta junto a ellas.
Antes de abandonar la zona pasamos por las ruinas
romanas del Capitolium y subimos al castillo
para verlo de cerca. Cuando estamos de vuelta abajo estamos sudando
la gota gorda.
De camino al hotel pasamos por la Piazza della Vittoria, con sus
llamativos edificios modernos, y por la Torre della Pallata.
Llegamos al hotel con la intención de no salir más
hasta mañana y descansar, no tanto del paseo como,
específicamente, de la subida al
castillo.
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