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Día
7 (02/03/2024) Luquillo
Antes
Este
día
tendremos que madrugar para ir al aeropuerto pues tenemos el vuelo a
Puerto Rico a las 7:40.Al llegar, recogeremos el coche de alquiler y
conduciremos hasta Luquillo, que usaremos como base para visitar el
Parque Nacional El Yunque.
Podríamos visitar una de las rutas en El Yunque este día o
simplemente pasar el día disfrutando de la playa y de la
gastronomía local en Luquillo.
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Después
El despertador suena a las 4h para tener tiempo de desayunar
lo último que nos queda y preparar el equipaje, incorporando
los souvenirs que dejamos en una bolsa suelta. Todo tiene que estar
listo para nuestro vuelo a Puerto Rico. Unos minutos antes de las 5h
pillamos el Uber a la Terminal 1 del aeropuerto de Fort Lauderdale,
donde nos facturan la maleta en un mostrador en el exterior antes de
entrar. Pasamos el control de seguridad y estamos listos en nuestra
puerta de embarque algo pasadas las 5:30h. Todo ha ido muy rápido.
Embarcamos en nuestro vuelo de la aerolínea Southwest
airlines, que tiene un sistema diferente a todas las demás: no hay
asientos asignados sino posiciones en la cola de entrada.
A la llegada tenemos que esperar el mini bus de la compañía
de alquiler de coches para alcanzar la oficina y completar los
trámites.
Ya con el coche, seguimos el camino para salir de San Juan en dirección a la
parte Oeste de El Yunque cuando vemos un restaurante de la franquicia
Popeye's, que ya ha dejado huella en nosotros, y paramos allí. 6 Piezas
deshuesadas y una ración de alitas con guarniciones de
Mac&cheese y patatas majadas por 23$, incluyendo dos coca colas
y una botella de agua. Nos pegamos un festín y es la comida más barata
que hemos tenido hasta ahora.
Siguiendo la autopista, pronto nos adentramos en la selva
que pertenece a El Yunque y nos maravillamos con la vegetación.
Paramos
en la Quebrada para hacer unas fotos del río peleándose con las rocas
y, más tarde, hacemos otra parada en la Cascada del Espirito Santo donde
se demuestra que hemos alcanzado una buena altura, pues de puede ver la
costa y el mar desde aquí.
En cuanto aparece la carretera a nuestra derecha la pillamos
para volver a la autopista principal y poder llegar así a Luquillo,
donde hacemos el check in en el hotel.
Salimos a disfrutar un rato de la playa, cuya arena tiene un
intenso y peculiar color marrón. El agua está templada pero las olas
golpean con fuerza.
Tras las duchas salimos a pasear y explorar la zona. Hay
muchos restaurantes y clubs de copas repartidos entre las coloridas
casas. Al llegar al hotel me pillo un coco por 5$ que me tomo
contemplando el mar. El viento ha sido una constante desde que llegamos
y las olas siguen llegando con violencia. Parece que es un buen sitio
para surfear.
Nos recogemos temprano, como es habitual, en cuanto oscurece
pero hay una fiesta en el restaurante de al lado que se oye como si
estuviera junto a la pared, lo que es bastante así. Nos explican que
tienen un grupo reservado para hoy y que será así hasta las 22:30h.
También nos dicen que mañana tienen otro grupo por lo que será igual y
nos dan la opción de devolvernos el dinero de mañana si nos queremos ir
a otro hotel, y la tomamos haciendo reserva en una casa próxima a
la terminal de ferris donde tendremos que ir al día siguiente.
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