Hoy salimos de la ciudad pillando el tren en
Pirámide que
lleva a Ostia Antica, las ruinas de la ciudad que hacía de puerto de la
capital del Imperio romano. A la vuelta aprovecharemos que la misma
línea de tren tiene una estación frente a la Basílica de San Pablo
Extramuros para visitarla.
Los puntos marcados en el itinerario de la imagen
son:
0- Grand Hotel Tiberio
1- Pirámide
2- Ostia Antica
3- Basílica de San Pablo Extramuros
Después
El día comienza temprano ya que hay un largo
camino hasta Ostia Antica, ya fuera de Roma. Sobre las 9h iniciamos
nuestra travesía, muy similar a la de ayer, pero bajando dos paradas
después de Colosseo, en la estación de Piramide.
Hemos de salir a la calle para acceder a la
estación de tren de "Porta de San Paolo" y fuera vemos lo que le da
nombre a la estación de metro y a la de tren.
Allí nos subimos al tren con destino C. Colombo
que, en algo menos de una hora, salva las siete estaciones que hay
hasta nuestro destino. Allí hay un corto camino hasta la entrada a las
ruinas de la ciudad que hacía de puerto de la antigua Roma, donde nos
ahorramos los 8€ agotando las tres visitas de nuestra Roma Pass.
En el momento de adentrarnos en el recinto ya
sabemos que esta visita nos va a gustar: estamos solos, podemos
interactuar con las ruinas a voluntad y todo parece estar bien indicado
para saber qué estamos viendo.
0- Acceso 1- Termas de Neptuno 2- Teatro 3- Thermopolium
4- Casa de Diana 5- Capitolium 6- Termas y Templo de Augusto y Roma
7- Horrea Epagathiana 8- Casa de Amor y Psique 9- Termas de los siete Sabios
10- Escuela de Trajano 11- Puerto
El mapa de las ruinas ya nos advierte de que este
lugar es muy grande y nosotros vamos avanzando por la vía principal,
hecha con desgastadas piedras irregulares, sin ningún plan preconcebido.
Tras un breve paseo entre árboles y cimientos que
parecen crecer hacia arriba con sus paredes, como si también fueran
plantas, la vía desemboca en lo que ya sí parece una ciudad. A nuestra
derecha aparecen las Termas de Neptuno, con unos impresionantes
mosaicos.
Después llegamos al teatro, donde parecen
acumularse los visitantes, con incluso una excursión de un colegio.
La cosa se complica, pues ya no se trata de seguir
un camino único, sino que aparecen calles y diferentes manzanas y
deambulamos por ellas intentando explorar lo máximo posible.
Nos metemos por calles con casas que debieron ser
de gente adinerada por lo grandes que son. Es lo que llamaríamos un
buen barrio. También recorremos el Thermopolium, una taberna que
mostramos en este video:
Llegamos al Foro, que ya divisáramos antes de
salirnos de Decumanus Maximus para explorar las casas de la
derecha. Allí encontramos los restos del Capitolio y del Templo de
Augusto y Roma.
Luego escogemos la Via della Foce para perdernos y
estar solos explorando uno de los barrios más alejados. Encontramos
edificios a los que todavía se puede subir a su segundo piso. Nos
maravillamos con las Termas de los Siete Sabios, que exploro en este
video:
Comprendemos que hemos de iniciar el retorno y que
llegar hasta el puerto es demasiado. Son las 12:30h cuando emprendemos
el camino de vuelta procurando pasar por lugares que no exploráramos al
venir.
La visita ha sido excelente. Esto de explorar a tu
aire una ciudad del imperio romano es un placer desconocido y en
peligro de extinción.
Son las 13:20h cuando dejamos el recinto
arqueológico y las 13:40h cuando bajamos una estación antes del final
de la línea, en Basilica S. Paolo, y es que queremos visitar la
basílica que le da nombre a la estación y que se conoce como San Pablo
Extramuros.
Es muy grande, como nos lo demuestra la caminata a
lo largo de su cara Este hasta alcanzar la entrada.
Por dentro, su amplitud se muestra en espléndido
mármol blanco, grandes estatuas y columnas y techos altísimos y muy
decorados.
El altar muestra la reliquia que le da sentido:
las cadenas de las que fue prisionero San Pablo.
Hay un bonito belén con partes animadas. Fuera, un
pequeño jardín acompaña una imagen preciosa de una de sus fachadas.
Son las 14:15h cuando dejamos la basílica con los
deberes de hoy cumplidos y nuestra única prisa por comer. La primera idea es llegar al
hotel y comer por allí ya que creemos tener un atajo con respecto al
camino de esta mañana: en lugar de pillar el metro en Piramide para
luego cambiar al tren, podemos pillar el tren directamente, ya que el
mapa que tengo muestra que la línea FM3 -que es la nuestra - nace ahí
también.
Así lo hacemos, pero nos sorprendemos al ver que
la primera estación es "trastevere" y, sabiendo la oferta gastronómica
de ese barrio, y que ya probáramos ayer, decidimos bajarnos. Aunque no
tomamos la decisión a tiempo y lo que hacemos es bajarnos en la
siguiente estación: Quattro Venti. Pensamos que una estación no nos
dejará muy lejos.
Sin embargo al bajar vemos un barrio residencial.
No sabemos muy bien donde estamos, pero como estamos hambrientos y
vemos un restaurante nos metemos sin dudarlo. Se llama Bruno ai 4 venti y se ve moderno y, ya con la carta en la mano, caro.
Pedimos plato único de pasta pensando que por el
precio será muy abundante, aunque resulta ser de tamaño normal, aunque,
eso sí, muy bueno. Añadimos algunos Antipasti para no quedarnos con
hambre y acabamos pagando algo más de 30€ en total.
Volvemos al tren para salvar las tres estaciones que nos separan
del hotel, donde solo saldremos a picar algo sin salir del barrio, que
hoy ya hemos caminado bastante.