Día 4 (07/09/2007)   Regreso


Antes   

  No tendremos tiempo para mucho ya que, aunque la hora de salida del avión es las 12:15, al tener que estar una hora antes y con otra hora que tarda el autobús en llegar al aeropuerto, debemos salir del hotel en torno a las 9:30.

   A las 13:45h está prevista la llegada a Girona.


Después


   Hacemos el checkout y pretendemos desayunar por el camino, concretamente, comprar algo de la pastelería que hay frente al hotel y cuyo escaparate tanto ha llamado nuestra atención estos días.

   Nos llevamos una especie de coca con piñones y miel y dos pedazos de una tarta de chocolate y arándanos, pero no sin dificultad. Cuando te apartas de lo específicamente turística puedes descubrir que el inglés puede ser tan inútil como cualquier otro idioma. Así que conseguimos nuestro propósito usando los primitivos gestos.

   Fuera de esa parada, seguimos la ruta prevista: metro Cambronne hasta Charles de Gaule y volver a la parada de autobuses donde nos dejaran hace tres días para adquirir los dos tickets, de 13€ cada uno, para el aeropuerto de Beauvais. Llegamos un pelín justo, pero a tiempo.

   Es en la hora de trayecto en ese autobús donde podemos dar cuenta de nuestros respectivos trozos de tarta que están tan buenos que nos dejan el pensamiento de "Deberíamos haber comprado más".

   De Girona a Barcelona paramos en una masía a comer. Han sido tres días tan intensos que se diría que hemos estado fuera un mes.

   Hemos concentrado mucho las visitas y realmente acabábamos cansados cada noche que, eso sí, la dormíamos estupendamente. Evidentemente, París es una ciudad que requiere más tiempo, y es que hay mucho por ver, y muy espectacular.

   Pero ya volveremos y, mientras, como se suele decir -al menos siempre que se reune Humphrey Bogart con un gendarme francés-, siempre nos quedará París.